Mundial de Rugby 2027: Japón, en el Grupo E
El sorteo de la Copa Mundial de Rugby 2027, que se disputará en Australia, se celebró en Sídney. La selección japonesa, los Brave Blossoms, quedó encuadrada en el Grupo E junto a Francia, Estados Unidos y Samoa. El torneo se jugará entre el 1 de octubre y el 13 de noviembre de 2027 en varias ciudades australianas, con un nuevo formato de 24 equipos y seis grupos.
En este formato, cada grupo está formado por cuatro equipos que se enfrentan en una liguilla de todos contra todos. Tras la fase de grupos, avanzan a octavos de final los dos primeros de cada grupo y, además, los cuatro mejores terceros. Para Japón, esto significa que será aún más importante sumar puntos bonus en las victorias y, cuando toque perder, evitar derrotas abultadas que dañen la diferencia de tantos.
Historial de Japón ante sus rivales del Grupo E
El balance histórico de Japón frente a sus rivales del Grupo E (cifras aproximadas a finales de 2025) es el siguiente. Sobre el papel hay duelos claramente desfavorables, pero hablamos de una selección que ya ha protagonizado grandes sorpresas en Mundiales, por lo que cabe esperar un rendimiento por encima de lo que marcan los números.
| Rival | Partidos | Victorias Japón | Derrotas Japón | Empates | % victorias Japón (aprox.) |
|---|---|---|---|---|---|
| Francia | 13 | 0 | 12 | 1 | 0% |
| Estados Unidos | 24 | 10 | 13 | 1 | ≈42% |
| Samoa | 16 | 5 | 11 | 0 | ≈31% |
Francia: un único disparo ante una candidata al título
Francia lleva años partiendo entre las favoritas tanto en el Seis Naciones como en los Mundiales recientes. Profundidad de plantilla, solidez en las fases estáticas y una línea de tres cuartos capaz de romper partidos hacen de los galos el rival más potente del Grupo E. Japón aún no ha logrado vencer a Francia en Test matches, aunque en 2017 firmó un meritorio empate a domicilio que demostró que es posible competir si el plan se ejecuta durante los 80 minutos.
Si Japón quiere buscar la campanada, deberá apoyarse en una defensa muy disciplinada y en un juego al pie inteligente para llevar el partido a un marcador bajo. Resultará clave minimizar las infracciones para no conceder golpes de castigo fáciles. Si los Brave Blossoms llegan al tramo final con el marcador apretado, no se puede descartar un desenlace dramático.
Estados Unidos: imponerse al físico con disciplina y velocidad
El balance histórico frente a Estados Unidos es prácticamente igualado, pero en los últimos años Japón ha mejorado su gestión de los partidos y ha sido capaz de ganar con marcadores más amplios. Aun así, el XV estadounidense sigue siendo un equipo muy físico, con delanteros poderosos, dureza en el contacto y presión desde el maul y las recepciones de saque de centro.
Para Japón, la clave estará en hacer valer su disciplina y su capacidad para jugar a alto ritmo. Eso implica apoyos rápidos alrededor de los puntos de encuentro, continuidad precisa en ataque y buena organización tanto en la persecución del juego al pie como en la defensa del mismo. No sería extraño que ambos equipos se vieran las caras en partidos de preparación antes de 2027, por lo que el trabajo de scouting y la información serán fundamentales.
Samoa: dominio reciente de Japón, pero un rival capaz de cambiar el partido en una jugada
Aunque Samoa domina el historial total, Japón se ha impuesto en los tres enfrentamientos mundialistas más recientes –2015, 2019 y 2023–, tomando la iniciativa en los grandes escenarios. Sin embargo, Samoa sigue siendo un conjunto peligrosísimo, capaz de cambiar el rumbo del encuentro en un instante gracias a los offloads tras el contacto y a los contraataques a campo abierto.
Para asegurar la victoria, Japón deberá mostrarse sólido bajo los balones altos, tomar buenas decisiones en las devoluciones de patada y frenar los offloads con segundas y terceras defensas contundentes. A nivel mental, será vital evitar la acumulación de golpes de castigo cuando aumente la presión. Es un partido que suele decidirse por los errores, y probablemente sea el duelo del Grupo E que Japón menos se puede permitir perder.
Escenarios de Japón para alcanzar los octavos en el nuevo formato
Con 24 equipos y seis grupos, avanzan a octavos de final los dos primeros de cada grupo y los cuatro mejores terceros. Para Japón, el plan mínimo pasa por ganar los duelos directos frente a Estados Unidos y Samoa. A partir de ahí, la cantidad de puntos bonus que logre –incluido el partido ante Francia– será decisiva.
El escenario ideal sería sumar tres victorias, incluida una histórica ante Francia, para pelear incluso por el primer puesto. Incluso con dos triunfos y una derrota, la clasificación como segundo o como uno de los mejores terceros es un objetivo realista si la diferencia de tantos y los puntos bonus acompañan.
Después de aquel triunfo ante Sudáfrica en 2015 y del pase a cuartos de final en el Mundial de 2019 en casa, este Grupo E puede definirse como «un grupo exigente, pero en el que el billete a octavos es un objetivo alcanzable» para Japón.
Con menos de dos años por delante, será interesante seguir cómo evoluciona el modelo de juego de los Brave Blossoms y qué nuevos nombres se consolidan. La forma en que afronten a rivales tan distintos como Francia, Estados Unidos y Samoa marcará el camino hacia el Mundial de Rugby 2027.
